martes, abril 23, 2024
Internacionales

Ibiza busca extranjeros para infiltrarse en fiestas clandestinas y ayudar a la Policía

Buscan personas de entre 30 y 40 años para que “se muevan de manera encubierta en los circuitos donde se organizan” estos eventos y poder anticipar su realización.

En medio del rebrote de contagios de coronavirus que afecta a España, Ibiza busca poner un freno a las fiestas ilegales. Lo que acá conocemos como fiestas clandestinas se ha vuelto un problema en la isla española y las autoridades intentan encontrar una solución.

En ese marco, publica el diario La Vanguardia, el Consejo Insular de Ibiza está preparando la contratación de “jóvenes extranjeros de entre 30 y 40 años” que “se muevan de manera encubierta en los circuitos donde se organizan” estos eventos. El objetivo es anticipar estas fiestas y “abortarlas de forma preventiva”.

“No son sólo un tema relacionado con el orden público, como siempre lo han sido, sino que ahora suponen un riesgo evidente para la salud de las personas”, afirmó Mariano Juan, vicepresidente primero del Consell Insular d’Eivissa.

¿Por qué buscan foráneos? “La propia Policía dice que es difícil para ellos infiltrarse, como los conocen los lugareños. Así que tenemos que buscar ayuda fuera”, explicó Juan. Las autoridades de la isla prevén este mes poner en marcha un plan piloto de estos rastreos.

La mayoría de estas fiestas se llevan a cabo en domicilios particulares, y la convocatoria se realiza a través de las redes sociales o en establecimientos turísticos, lo que atrae, además, a los turistas.

Los funcionarios locales estarían ahora en conversaciones con una empresa para buscar la manera de formar un equipo que pueda ayudar a la Policía a detectar estas fiestas ilegales. No obstante, reconocen la dificultad de implementar la medida: “No es fácil ya que el perfil que buscamos es de extranjeros entre 30 y 40 años, pero llevamos dos semanas trabajando en él”.

En medio del rebrote que afecta a Islas Baleares (y a todo el país), Ibiza es el lugar que más preocupa, indicó la consejera de Salud del Gobierno balear, Patricia Gómez Picard, ya que la gran cantidad de turistas contribuye, entre otros factores, al aumento de casos.