viernes, abril 19, 2024
Locales

A 20 años de la inundación: el río Salado desbordó y se llevó miles de sueños

¿Se pudo haber evitado la catástrofe?

Con redacción de Diario UNO.

El ingeniero civil, Marcelo Gabriel Berrón, contó hace 20 años en medios de comunicación locales y nacionales, en un contexto de escasa información, los motivos fundamentales del porqué ingresó el agua del río Salado en la capital provincial en abril de 2003. Narró y explicó con lujo de detalles, en medio de la tragedia y la confusión que provocó la inundación en la ciudad de Santa Fe, todo lo acontecido.

Un documento redactado por el profesional describe los hechos concretos que englobaron la peor catástrofe de la historia moderna santafesina, haciendo hincapié en algunos puntos realmente elocuentes: el “Talón a Aquiles” de la ciudad, el aviso del río Salado 45 días antes al trágico 29 de abril de 2003, los detalles de la obra de defensa inconclusa y la “perica perfecta” con lo ocurrido cuatro años después, el 2007, cuando el nivel del Salado superó los 6,37 metros y el agua no ingresó a la ciudad con las obras de defensa concluidas.

El documento de Marcelo Berrón

La disección de un proyecto integral

La obra de la avenida de Circunvalación es un único proyecto, integral, que va desde la salida del puente Carretero hasta el cierre norte, con una curva en su defensa que pasaba por detrás del campo de golf (en la zona del Hipódromo), en el proyecto original.

A esta única obra integral, se la dividió en tres partes: el primer tramo, desde la ruta 11 (salida del Carretero) hasta la autopista Santa Fe-Rosario; el segundo tramo, desde allí hasta Blas Parera (con una rotonda frente al Jockey Club); y el tramo tres que cerraba el anillo de defensa, entre calle Gorostiaga y Estado de Israel, hasta llegar a una zona de cotas naturales más altas y en el noroeste de la ciudad.

El terraplén de defensa (del segundo tramo) “muere en un absurdo”El mismo terminaba en un muro de mampostería de 30 centímetros de espesor, transversal a la defensa en calle Gorostiaga. Hasta allí, el terraplén tiene una cota de 9 metros y luego baja a una cota 4,50 metros: por allí ingresó el agua.

En ese preciso lugar es donde se comienza a generar un “río paralelo” que fue arrasando todos los barrios del oeste, y sin salida, porque el terraplén de 9 metros lo impedía. El agua se embalsó entre el terraplén de defensa y las cotas naturales más altas de la ciudad de Santa Fe, hasta que se le dio salida al abrirse las brechas en el terraplén Irigoyen y en la avenida Mar Argentino, cuatro días mas tarde, 30 de abril de 2003 a las 15 horas.

El domingo 27 de abril de 2003 (día de elecciones nacionales) a las 14 horas ingresaba un “hilo de agua”, de no más de medio metro de ancho. El miércoles 30 se daba el pico; imaginen todo lo que creció y cuál fue el volumen de agua que entró por el tramo tres inexistente, que ya teníamos 130.000 evacuados en la ciudad. Lo más increíble fue que el domingo de las elecciones vi cómo una pala frontal, una máquina, trataba de parar el agua con arena. Era más o menos como pretender vaciar una pileta de natación con un dedal.