viernes, abril 26, 2024
Provinciales

Omar Perotti y una funcionaria de su gabinete fueron víctimas de espionaje ilegal durante el macrismo

El gobernador es el principal dirigente mencionado en la lista que entregó la interventora de la AFI, Cristina Caamaño. También aparece la Secretaria de Derechos Humanos, Lucila Puyol.

Omar Perotti, gobernador de la provincia de Santa Fe.

La interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, radicó este martes una denuncia contra la anterior conducción del organismo durante el gobierno de Mauricio Macri “por producción de inteligencia ilegal contra personas vinculadas a la actividad política, periodistas, dirigentes y fuerzas policiales”.

Omar Perotti es uno de los políticos santafesinos que aparecen entre los supuestos objetivos de tareas de inteligencia bajo la presidencia de Mauricio Macri. Sin embargo, no es el único, el diputado nacional del Frente de Todos, Marcos Cleri, advirtió que se encuentra entre unas 80 personas cuya dirección de e-mail había sido intervenida desde junio de 2016 sin autorización u orden previa de la Justicia.

“Las tareas de inteligencia que en este acto se denuncian no se encuentran ordenadas ni autorizadas por ningún magistrado. Sólo fueron dispuestas por las autoridades del organismo que hoy se encuentra intervenido. Es así que debemos hablar lisa y llanamente de producción de inteligencia ilegal”, subraya la denuncia en alusión a la anterior gestión de la AFI, encabezada por Gustavo Arribas, un empresario del mundo del fútbol de íntima relación con Macri, y Silvia Majdalani.

Según informó el sitio Infobae, dos dirigentes provinciales más forman parte de las presuntas víctimas del espionaje ilegal. Por un lado aparece Lucila Puyol, actual secretaria de Derechos Humanos de Santa Fe e integrante de la agrupación Hijos. A ella se suma Gerardo Rico, exintegrante de la Cámara baja en la Legislatura y referente del Movimiento Evita.

Caamaño asumió la intervención de la AFI a fines del año pasado, dos semanas después de la asunción de Alberto Fernández, que la designó para hacerse cargo del organismo por seis meses. Según fuentes oficiales, la interventora continuaría al frente de la Inteligencia una vez que esa intervención finalice, es decir, desde el mes próximo.

En los últimos meses, la ex fiscal avanzó en ese sentido en una profunda revisión de la anterior gestión a cargo de Arribas, un empresario ligado al fútbol que se hizo cargo del organismo durante los cuatro años de la gestión de Macri, incluso a pesar de los cuestionamientos internos.