viernes, abril 26, 2024
Un Día Perfecto

Le abrieron el cajón

Alejandra Rodenas, Vicegobernadora de Santa Fe.

Por Martín Sperati

Alguien tiene la llave del cajón de la vicegobernadora, Alejandra Rodenas. Puede que algún colaborador cercano y de confianza. Puede que en un descuido la presidenta del Senado se retiró de su despacho y olvidó cerrarlo. Como sea el expediente llegó al recinto. Ese documento era nada más ni nada menos que el pedido de desafuero al Senador, Armando Traferri, jefe político del espacio NES (Nuevo Espacio Santafesino) integrado por la mandamás de la Cámara Alta.

¿Pero cómo? ¿Rodenas no iba a cajonearlo?

Una vez que el pedido de los fiscales Edery y Schiappa Pietra perforó Mesa de Movimiento se tejieron un sinfín de destinos. Ahí aparecieron elucubraciones de todo tipo y quedaron en evidencia las y los periodistas que, mediante micrófono o en las crónicas gráficas, querían dejar en offside a la vicegobernadora, al tiempo que presionaban para que la jefa del senado de curso parlamentario al expediente ingresado.

Rodenas quiere cajonear el expediente y Perotti apura para que eso no suceda”, eran algunas voces que querían instalar la idea de una ruptura entre gobernador y vice.

Sin embargo, todo lo contrario. Rodenas compartió con el gobernador un acto en Paraná justo cuando el expediente llegaba a la legislatura. El ingreso fue a las 13:30 y ya a las 15: 00 estaba en Secretaría Parlamentaria por pedido expreso de la rosarina, para que se incluya en los Asuntos Entrados y vaya a las comisiones asignadas. Rodenas cumplió los pasos parlamentarios y dejó la pelota (como corresponde) a los Senadores y Senadora.

Finalmente el pedido de desafuero no prosperó en el recinto. Ganó el rechazo y la justicia deberá seguir investigando sin la inmunidad de Armando Traferri (puede hacerlo).

¿Qué hay detrás de todo esto?

Los periodistas que no “operamos” queremos la verdad, dijo este servidor en sus redes sociales. Los quijotes, los sanos del periodismo (por suerte) queremos que se llegue a la verdad sobre la base de un proceso que permita que todas las garantías estén dadas para que el acusado tenga el acceso a la defensa y para que los que acusan puedan trabajar libremente, con elementos probatorios y dejando al margen a la política.

El hecho de que Marcelo Saín opine sobre el tema le pone un manto de dudas a todo esto. Allí, el Ministro de Seguridad utilizó sus redes sociales para pegarle un “poco” a Armando Traferri, que lo había acusado en pleno recinto de “Jefe de Operaciones” y de estar digitando el entramado que “sólo quiere, con su remerita negra, ponerme las esposas”.

Lo cierto es que si Saín, principal acusado por Traferri se hubiese llamado a silencio, no daba lugar a los senadores a brindar protección al sanlorencino, con independencia de los elementos que para ellos no constituyen motivo para quitarle la inmunidad a su compañero.

La historia juzgará a los senadores. Los ciudadanos de esta provincia esperan que la votación de cada uno haya sido producto de sus propias convicciones y no bajo la decisión colectiva del llamado “corporativismo”.

Ahora, los que dijeron que Alejandra Rodenas iba a cajonear el expediente y no se retractaron, quedaron en evidencia e innecesariamente dejaron la puerta abierta para pensar que se trataba de “operaciones” sin anestesia.